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 Con más de 20 grados a la sombra, el primer día de primavera del año augura ya otro verano abrasador en Córdoba. La pequeña ciudad, tranquila, es tomada al asalto por cientos de turistas cada fin de semana. La Mezquita, el puente romano, los Alcázares, la Judería… Un buen trozo de la ciudad ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad y no es para menos: se respira historia en cada esquina. El Rock nacional también tiene en esta ciudad un referente, un bastión llamado Medina Azahara. El guitarrista Paco Ventura, con su natural buen humor y su genuina amabilidad, me recoge a la puerta del hotel para invitarme a su casa situada en las afueras. Tras una breve inspección a una impresionante muestra de discos de oro, Paco me enseña orgulloso su medalla a las Bellas Artes, probablemente uno de los galardones que más pueden decir del músico que lo recibe. No puedo sino sentirme orgulloso de que un premio de estas características honre el mundo del Rock de nuestro país. Antes de proceder a la entrevista en sí, tengo la suerte de contemplar algunas guitarras realmente excepcionales, como una Fender Stratocaster original de 1961, otra sunburst de 1979 firmada por Yngwie Malmsteen y una Fender Telecaster natural de 1978. Como parte de un recibimiento más que especial, Paco conecta el PC y me deleita con un par de mezclas desde su secuenciador. La habitación que hace las funciones de home-studio alberga un buen número de instrumentos y “cacharros”, el marco ideal para empezar a charlar sobre guitarras. Vamos allá…
1 – ¿Cuando empezaste a tocar la guitarra? ¿Cuáles eran tus influencias?
En realidad fue bastante tarde, cuando yo contaba con 18 años. Ya sabía por entonces que necesitaba algo nuevo en mi vida, estaba a punto de comprarme una bicicleta con el dinero pero mi padre me disuadió. Y, vamos, ha sido la mejor elección de mi vida (risas). Le agradezco eternamente que pusiera fin a mis aspiraciones ciclistas con aquella frase lapidaria: “niño, a los dos días te vas a cansar de acarrear la dichosa bicicleta desde el cuarto piso”.
Influencias... Recuerdo que vi un Musical Express de Triana, un número especial. En ese momento decidí invertir aquellas diez mil pesetas en una guitarra, era un modelo tipo Stratocaster. Ya presentí que iba a surgir una unión intensa y muy larga con el instrumento. Recuerdo que estaba sacando la guitarra de la caja de cartón mientras sonaba un tema de Santana en la radio. Mientras afinaba el instrumento por primera vez ya estaba sacando el tema, me sentí realizado al instante. Por aquel entonces, el grupo Triana era posiblemente mi mayor influencia: estos pioneros del Rock Andaluz concibieron un modus operandi a la hora de hacer música en este país. La fusión resultante de la música de raíces con el Rock (Triana, Medina Azahara) o el Pop (Manolo García, por ejemplo) ha creado todo un género a nivel nacional. En nuestro anterior disco, ‘Se Abre la Puerta’, tenemos una gran colección de versiones de Triana, a modo de tributo, claro está. 
2 - Eres autodidacta y de hecho no recibiste clases…
En absoluto, ninguna. Soy de aquella generación de guitarristas autodidactas que han tenido los mejores profesores del mundo: Clapton, Blackmore, Jack E. Lee, Vivian Campbell, etc. Es decir, lo que sonaba por los altavoces de mi tocadiscos. Toda la generación de guitarristas de los ochenta me influenció mucho, no sólo la forma de tocar música, sino la forma de componer, la manera de hacer temas con melodía, el Rock Clásico. Tengo una escuela muy rockera (Van Halen, Gary Moore) pero guitarristas como Carlos Santana me han abierto los ojos a la hora de enfocar el trabajo melódico.
3 - Pero tu mayor influencia ha sido Ritchie Blackmore.
Yo pienso que sí. Lo reconozco, dejo que eso se note y me gusta. Me gusta rendirle homenaje. Pese a su mal humor legendario, es un “genio loco” que ha redefinido la música Rock introduciendo los matices neoclásicos que tanto han influenciado posteriormente a Malmsteen y que ahora son parte del bagaje de tantos músicos. Me gustan muchos otros guitarristas de diversos estilos como Eric Johnson, Neal Schon, Mark Knopfler, Paco de Lucía, Sonny Landreth, John McLaughlin… No me cierro en banda, procuro mantenerme al tanto de lo que el instrumento puede ofrecer. 
4 - Hablemos de Shredders. Van Halen, al que has mencionado, tomó el testigo de la genialidad de Hendrix en los ’80. ¿Qué ha pasado desde entonces? ¿Quién está revolucionando el mundo de la guitarra?
Bueno, Yngwie Malmsteen también marcó para siempre el devenir del sonido rockero de los ‘80 (Vinnie Moore, Joey Tafolla). Hasta que escuché “Rising Force”, no imaginé que la guitarra de Rock podía acercarse tanto a la música clásica. Ya en Alcatrazz, Malmsteen había demostrado ser un fuera de serie, pero esos tema instrumentales del primer disco marcaron a fuego las nuevas hornadas de guitarristas, tanto los de aquella década como otras más actuales como Chris Impelliteri, etc. 5 - Yngwie Malmsteen no es un personaje precisamente popular entre muchos guitarristas. Pese a que muchos le adoramos, es a menudo maltratado por la prensa.
Es normal. Si Hendrix viviese, lo veríamos usando su wah-wah, quemaría sus Stratocasters… Es su estilo y no puedes pedirle más. Yngwie tiene el suyo y en este sentido, por muy cansino que sea, es él, o lo odias o lo amas y a mí me encanta, lo escucho mucho, aunque no excesivamente, he tenido etapas más obsesivas con él. Ahora estoy más centrado en algunos guitarristas que te comentaba antes, como Eric Johnson, Joe Bonamassa… 
6 - Hablemos de guitarristas de Blues, pues… ¿Duane Allman, Gary Moore…?
Hombre, Allman si que creó escuela para un montón de guitarristas. Kenny Wayne Shepherd admite que “Skydog” es su gran influencia. Peter Green de los primeros Fleetwood Mac influenció totalmente a Gary Moore. Me gustó mucho cómo precisamente Gary Moore salió al rescate del Blues con su ‘Still Got the Blues’. Los que éramos más afines al Rock en aquella época descubrimos de repente todo un mundo, el Blues se hizo más asequible. Ésa fue su gran labor, para mí. Quedó claro que el Rock enérgico de su Les Paul distorsionada, llena de armónicos y un gran sustain, se fusionó a la perfección con el Blues tradicional de décadas anteriores. También me gusta mucho SRV, por supuesto. Y uno de los momentos claves del renacimiento del Blues se lo debemos a la película “Crossroads” (Cruce de Caminos), con ese mítico duelo final con Steve Vai. 7 - ¿Eres de la escuela Vai-Satriani?
Hombre, algo hay, en algún momento puedo hacerles algún guiño. A Satriani hay que agradecerle mucho su visión comercial a la hora de hacer temas instrumentales. Acercó un estilo a toda una legión de guitarristas. Vai, en cambio, empezó tocando en un estilo más similar a Frank Zappa. Siempre están ahí: han influenciado, como te digo, a casi todo el mundo en mayor o menor medida. 
8 - Ahora los chavales empiezan a decantarse por Zakk Wylde como héroe número uno.
Cuando toqué en L.A., en el famoso Whisky A Go Go, tuve ocasión de hablar con muchos guitarristas y puedo decirte que todos respetaban mucho tanto a Zakk Wylde por lo enorme de su sonido como a Vinnie Moore por su técnica. Pero Zakk tenía el mejor sonido y a mí me convenció cuando Ozzy le dio la alternativa junto a su banda: demostró una gran comprensión del repertorio y sabía lo que tenía que aportar a esa música. 9 - Intentemos hacer una cronología de tus guitarras…
Bueno, aquella copia de Stratocaster que te mencionaba me duró alrededor de un año. Luego me hice con una réplica de Gibson Les Paul negra (como la que salía en la contraportada del ‘Volumen Brutal’) y más tarde conseguí una Ibanez Musician, que era una guitarra preciosa y sonaba genial. En un concierto con Topo, en Ceuta, se la cambié a Pablo Salinas por su Ibanez Flying V tipo Korina ’58, las cambiamos a pelo. Cuando entré a formar parte de Medina Azahara, me hice además con una Fender Stratocaster de color plata metalizado (el más feo, con golpeador negro) con puente Floyd Rose. Mi primera Gibson fue una DeLuxe de 1976, con las pastillas tipo mini-humbuckers. 
10 - ¿Cuándo empezó tu afán coleccionista?
Pues mucho más tarde. Tuvieron que pasar algunos años hasta que Medina Azahara funcionara realmente bien. Tuve ocasión, entonces, de empezar a comprar guitarras en mis viajes. Empezó el GAS y no paró (risas). Hay etapas en las que he tenido muchas guitarras y etapas en las que menos, me he desprendido de muchas… Ahora tengo alrededor de 40, no sabría decirte con exactitud. En el 25 aniversario del festival de la guitarra de Córdoba, en colaboración con el ayuntamiento, organicé una exposición de guitarras en un patio cordobés, 25 guitarras para 25 años. 11 - De todas esas, algunas favoritas tendrás.
Hay guitarras de las que nunca me desprenderé, obviamente por motivos sentimentales, son realmente especiales para mí, como esa Gibson Deluxe que te comentaba, una Carvin que me compré en L.A., las Fender antiguas que tengo (de 1961, 1966, 1979)… En general me quedo con mis Fender, por alguna razón tocándolas en el escenario me siento bien, la Stratocaster tiene una magia que me hechiza. Será que sacan el Blackmore que llevo dentro (risas). He girado también con Parker, MusicMan… también alucino con mis dos Ibanez de la serie Frank Gambale y con un par de Suhr realmente impresionantes. He grabado el último disco de Medina Azahara con guitarras Tom Anderson y Suhr. Una Suhr Stratocaster color Dakota Red para los solos y la Tom Anderson para las rítmicas: armada con un piezo y con diapasón de ébano, suena de muerte. Donde se queda corta una Stratocaster, estas guitarras pisan a fondo y exprimen todas las posibilidades. 
12 - En materia de amplificadores también tienes donde elegir.
Aquí tengo por ejemplo una pequeña joya, un Mesa Boogie Mark II, perteneció al primer guitarrista de Medina Azahara, se lo trajo de Inglaterra. Cada vez que nos vemos, Javier Vargas intenta hacerse con él, pero aquí se queda (risas). Me he hecho recientemente con un cabezal Marshall JCM800 de 1983 que suena monstruoso, era del guitarrista de O’Funk’illo, Javi Valero. Tengo un cabezal Carvin, otro Marshall, un Soldano Hot Rod, un Bogner Ecstasy, un Fender Bassman…Utilicé el cabezal Bogner con el previo V-Amp para grabar el nuevo disco. Me gusta sacar un buen sonido de base para que luego la ecualización desde la mesa sea prácticamente inexistente o muy moderada. Le pregunto al técnico qué frecuencias necesita y en función de eso realizo los ajustes pertinentes en la cabina. No me gusta colorear demasiado el sonido. Como una mujer demasiado maquillada, el sonido de una guitarra llena de efectos suele causar el efecto inverso al deseado. 13 - ¿Cuales son tus proyectos actuales junto a Medina Azahara?
Tras la grabación del nuevo disco, estamos ultimando detalles. Se llamará ‘Origen y Leyenda’, y será una especie de celebración del 30 aniversario de la banda, pero con temas originales. El disco saldrá a primeros de mayo. Solemos girar casi todo el año y lo presentaremos muy pronto. Tendremos que elegir qué temas incorporamos al set-list y cuales descartamos: esto se me antoja particularmente difícil de decidir. Pasaremos por Madrid si todo va bien. 14 - ¿Vendrás al Guitar Day el 6 de junio?
Tenlo por seguro. Si mi agenda me lo permite, no me lo pienso perder. Un abrazo muy fuerte para todos los lectores de Guitarramanía. 
ÁLBUM DE FOTOS https://picasaweb.google.es/freebird.alabama/PacoVenturaMedinaAzahara# Por Freebird 2009-03-24 / 04:56:43 |
