Hola amigos,
debido a serios disgustos, unidos a problemas de salud, me fui del 25 al 31 de enero 2010 a Paris, a pasar unos días de relax en casa de unos amigos. Me ha sentado muy bien y he vuelto con las pilas cargadas, ya que todo ha salido a pedir de boca: Me llevaron aquí al Aeropuerto, me recogieron en Orly, me llevaron a todas partes, teatro, música, fotografía, etc...y al regreso igual.
Aproveché también para asistir a una cena de fotografos profesionales Parisinos que son la repera, incluso con ellos nos marcamos un "after" yendo a oír música ya bien entrada la noche y lanzando miles de clicks por todo Paris. En fin, Paris será siempre Paris, y que os voy a decir...
El caso es que he retomado con bastante fuerza la fotografia que había abandonado como afición seria debido a mis problemas para enfocar, al estar tan torcido, solo puedo enfocar al suelo con una Reflex. Por suerte en Paris, Boulevard Beaumarchais, hay más de 100 tiendas especializadas donde se encuentra de todo en fotografía y a precios que están nuevos un 30% más baratos que en España, sin hablar de la infinidad de tiendas de segunda mano.
Tras recorrer más de 20 comercios, por fin encontré un visor de ángulo Nikon nuevo, que se artornilla al visor original de la cámara y permite ver desde arriba y a través de él. Así que asunto resuelto, y a lanzar clicks por todas partes... Me uní hace meses a un grupo de profesionales por Internet y me voy poco a poco recuperando en esa afición olvidada, ya que ahora ya puedo hacer casi de todo. Además como los dedos apenas me obedecen para maltocar la guitarra, pues he intentado unir ambos mundos: Foto y Guitarra. Cosa que precisamente hago en este artículo/reportaje.
Por todas esas razones, estando en Paris, busqué la Web de Guitarras Vigier, encontré el teléfono de la empresa, llamé, me identifiqué, pregunté por Patrice que se puso en el acto, y le comenté que ya que estaba yo por esos lares, me apetecía mucho ir a saludarle, y si no era demasiada molestia ya que llevaba mi Nikon, y unos cuantos objetivos podría tomar algunas fotos de sus instalaciones para los lectores de Guitarramania.com. Ahí ya vi que se puso bastante dubitativo. Entonces le dije que respetaba su discreción y que si no le apetecía, no me iba a enfadar lo más mínimo. Solo quería ir si él lo deseaba.
Bien, el caso es que me contó que JAMÁS nadie que no sea de la empresa ha puesto los pies en su fábrica, y ni siquiera entra un fotógrafo profesional ya que él hace sus propias fotos promocionales de sus productos. Es muy discreto, y en resumidas cuentas: jamás ha dejado entrar a nadie con una cámara, ni siquiera a un empleado suyo. Son las reglas de su empresa desde siempre. Aún así, Patrice es un tipo llano, encantador, y simpático, por lo que me prometió pensarlo, y me invitó a comer en su ciudad.
Bien, para ir a Grigny (una ciudad industrial de las afueras a orillas del Sena) donde Patrice tiene sus naves, es ya bastante costoso en tiempo: Casi una hora de desplazamiento, entre metro para ir a la céntrica y subterránea gran estación de Châtelet ,donde se unen varias líneas de metro bajo el río Sena con otras líneas RER (trenes de cercanías muy rápidos y frecuentes, ya que pasan cada 3 minutos) cuya línea D lleva directo a Grigny.
Por el tiempo empleado por ese tren en llegar a su ciudad (35mn) debe de estar a bastante más de 40Km del centro, aunque sigue siendo las afueras de Paris que cuenta con unos 10 millones de habitantes entre el centro y su entorno. Con un día asqueroso de lluvia me presenté en la estación con mi pequeña mochila de equipo fotográfico.
Patrice vino personalmente a a la estación a recogerme en su coche, y me llevó a un restaurante manifiestamente conocido por él, ya que los dueños le llamaban por su nombre. Allí, durante el almuerzo, hablamos largo y tendido del NAMM, de los problemas del sector, y ya puestos, de sus procesos de fabricación. Le comenté que mi buen amigo Toni Fayos había evaluado sus dos modelos Expert que tengo prestados en casa para que la gente las pueda probar, y que le habían encantado, aunque Toni es muy puntilloso, y me comentó que el pulido lateral de los trastes estaba muy bien, pero que redondeado (es solo una mera cuestión estética) quedaba mucho mejor y ponía más en valor el excelente acabado de un instrumento de la calidad de Vigier.
Ahí Patrice se rió y me dijo: No sigas, ahora vas a conocer al responsable del trasteado y pulido de cantos, y me harás el favor de decírslo tu mismo, yo se lo llevo diciendo tiempo. Por fin me ha hecho caso, pero es muy bueno que se lo diga también alguien de fuera que no sea el dueño. Además si traes la cámara, ya que estás aquí, lo he pensado bien, y vas a tener el privilegio de visitarlo todo, de tomar cuantas fotos quieras, y de decir lo que te parezca sobre mis instalaciones. Eres el único que ha puesto aquí los pies con una cámara, así que te llevas la exclusiva.
Aquí está pues dicha exclusiva para los lectores de Guitarramania.com:
Las entrañas del sistema de fabricación pasa por una enorme máquina CNC de última generación que permite hacer varios cuerpos a la vez (hasta 20) y decenas de mástiles. Ahí es donde empieza el proceso Vigier de toda la fabricación:
La máquina está muy bien protegida, tiene un cabezal que está recubierto de una amplia vidriera de plástico a través del cual puede hacer alguna toma, y un pasadizo de goma junto a la máquina que tiene 1 metro de ancho. Si pones el pie en él, se detiene todo, así que tuve que conservar una distancia prudencial para no detenerla. La maquina impide que se acerque nadie mientras trabaja. Aún así la cabeza de fresado está protegida, pero por órden de Patrice levantaron automáticamente esa protección doble para que yo pudiera ver como funcionaba la fresadora en ese preciso instante en que estaba cortando 3 cuerpos. Podemos ver a Patrice en primer plano junto al responsable de la maquina, y un monton de mastiles recien hechos por la mañana con la misma CNC, observad que los agujeros de inlays, trastes, herrajes, ya salen bien hechos de esa preciosa CNC:
Hasta luego. |