Hola amigos, este viernes 3 de Octubre tuvimos el placer de compartir una excelente tarde de cata de Telecas. Tras haberlo comentado con mi buen amigo Swingman, decidí concertar una cita con Paco Pascual, para que nos recibiera en su casa. Swingman pasaría a recogerme junto a Twang30, ya que vivo a menos de 1/4 de hora de casa de Paco. Así que, a eso de las 5 de la tarde nos fuimos rumbo al domicilio de Paco, que nos recibió con la más absoluta de las amabilidades, como siempre. Tanto Alex (Swingman) como David (Twang30) tuvieron el placer de conocer a Paco y así catar algunas de sus famosas guitarras. David se volcó en una de las Broadcaster más emblemática y conocidas, ya que es la guitarra que sale en la portada del famoso libro de Nacho Baños dedicado a la historia de la Telecaster (serial nº 0872). Esta Broadcaster fue personalmente regalada por Nacho Baños a Paco Pascual con quien comparte una gran amistad. Al parecer Nacho, dispone de la más impresionante colección de Broadcaster del mundo. También dispone de la mayor colección de amplis Beteramp, así que en un acto de generosa locura, apareció por casa de Paco el día de su cumpleaños y sencillamente le regaló esta obra de arte cargada de misticismo e historia. Dicho sea de paso, estoy pendiente de concertar cita con Nacho al que entrevistaré, y espero no solo recabar sus palabras de experto, también espero poder publicar aquí algunas fotos de su impresionante colección.
Bien, tras esta larga introducción, ya paso a contar los pormenores de la tarde, con el acompañamiento de unas cuantas fotos que espero sean de vostro agrado. Como todos comprenderemos, cuando un miembro de este club de locos amantes de las Telecaster, lee en la pala de una guitarra la mítica palabra: Broadcaster, como es lógico, le entra cierto temblor de manos y le sube la adrenalina: No deja de ser una experiencia mística. Encontrarse ante tamaño testigo del principio de la creación del mundo musical tal como lo conocemos actualmente, no es algo que uno puede hacer a diario. Como bien sabemos es el primer tipo de guitarra eléctrica que Leo Fender fabricó, y no solo eso: También es la primera guitarra que se construyó en serie el mundo entero. Por si fuera poco, Leo Fender inventó con ella, además de un instrumento, todo un concepto: Una guitarra de mástil atornillado, que invoca la idea de "Kit" donde basta un simple destornillador para desmontar el instrumento entero, pudiendo así sustituir cualquier pieza usada o defectuosa. Nuestro querido amigo Twang30 sintió perfectamente esa profunda mezcla de sentimientos cuando se abrió el estuche.
Tanto es así que apenas si se atrevía a rozarla. Suerte que Paco le convenció de tomarla entre sus manos y así poder gozar de su tacto: Por cierto, la primera sorpresa: Tal como dijo Twang30, era ligerísma a pesar de su cuerpo de Fresno: Aquí podemos apareciar el excelente estado de esta guitarra que data de 1952, así que ya anda por los 56 añitos de edad, y sin embargo parece casi nueva: Costó algo convencer a David de que esa guitarra estaba ahí para ser tocada, y que debía de hacerlo. Inicialmente no hubo forma de convencerle que se la colgara, solo aceptó tocarla sentado, y con sumo cuidado: Este instrumento tiene un tono muy convincente: El puro Twang de las primeras Broadcaster. Su circuito es el típico y original. Con esa configuración de base, nada de poder permutar en limpio y agudo entre las tres pastillas como ocurre con las actuales Telecaster. La posición de mástil, incialmente pensada por Leo Fender para atraer a los músicos de Jazz tiene un condensador instalado a piñon fijo que se come todos los agudos, en un claro intento de que ese nuevo instrumento, incialmente despreciado por casi todos, fuese también una opción para los guitarristas de Jazz. El tono en esa posición es cálido y agradable aunque muy apagado: Similar al que obtendríamos ahora mismo con la pastilla de mástil de una moderna Telecaster bajando totalmente el pote de tono a cero. Es evidente que esta joya suena bien en cualquier posición, aunque no es menos evidente que una Broadcaster no es precisamente ideal para tocar Jazz. Nos consta que algunos clásicos lo intentaron y siguen habiendo bastante músicos de Jazz incondicionales de Fender, pero el mundo del Jazz (en general) se mantiene fiel y definido en cuanto a sus preferencias: Los instrumentos de caja, siguen gozando de una casi absoluta unanimidad en ese campo musical. Finalmente convencido Twang30 de que la correa era segura, que los Strap-locks eran de fiar, y que no había peligro alguno en colgarsela, lo hizo: El amigo David, fiel a su estilo, siempre dice que el Country es no solo un estilo musical, es también un estilo de vida que requiere de una vestimenta adecuada. y así le vemos: Siempre fiel a su sombrero vaquero, sus ropas negras y su largo abrigo. Aquí David se quitó el sombrero, ya que su exquisita educación se lo impone al estar dentro de una casa particular. En fin, como siempre, todo un Caballero. Por fin, lanzado y ya totalmente sumido en un particular estado de comunión con la Broadcaster, se lanzó ya a hacer bendings, y a dar un repaso a todos los estilos con los que suele deleitar a los asistentes a las quedadas de Guitarramania.com
En fin, una tarde memorable para todos nosotros ya que además de gozar de esa Broacaster, pudimos disfrutar de las pruebas de otros instrumentos igualmente interesantes (Ya les dedicaré otra entrega). En resumen, lo más valioso para mi, fue la excelente acogida que nos ofreció Paco Pascual, la cual permitió sin cortapisa alguna y sin limitaciones, que nuestro buen amigo David entrase en un estado de absoluto recogimiento,al verse confrontado a la experiencia mística de tener en sus manos una Broadcaster de pura cepa. Con ella gozó como merece. David es no solo un excelente amigo, es además una de las personas más abiertas y generosas que uno se puede encontrar por https://foros.guitarramania.com. En todas las quedadas se desvive por ayudar a todos: Si tiene que hacer una pequeña explicación o incluso una clase entera de Country, siempre está dispuesto a dar lo máximo de si mismo haciendo todo lo que está en sus manos para que nos sintamos realmente a gusto en su compañía. Vaya pues por delante este pequeño y merecido homenaje a David (Twang30), un gran amigo que ante todo es una gran persona. Tampoco me voy a despedir sin dar las gracias publicamente a Swingman por contribuir, como siempre, con todos los medios a su alcance, a que estos pequeños milagros ocurran. Finalmente, no me puedo olvidar de Paco Pascual, el anfitrión de esa mini-quedada, ya que sin conocer previamente a Swingman y a Twang30, no solo no me puso impedimento alguno a que invadieramos su casa, sino que al igual que su compañera, nos trató con la misma amabilidad que trata a todos sus amigos, poniendo a nuestra total disposición su imponente arsenal. Lo dicho: Una tarde memorable y sin desperdicio, aunque como siempre ocurre en estos casos, se nos hizo corta !!! |