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 Con ciertas marcas, los guitarristas lo tenemos claro. Pese al reciente aumento de los gurús pedaleros (capaces de recrear la circuitería de los pedales más antológicos) y las circuiterías virtuales de las pedaleras y amplificdores modernos, muchos músicos siguen siendo fieles a sus “stomp boxes”, los pedales de toda la vida, y no hay otro fabricante que haya podido hacer sombra a Boss si hablamos de pedales para guitarra eléctrica. La práctica totalidad de nosotros ha adquirido su primer pedal de distorsión Boss en la tienda del barrio. Muchos modelos siguen en línea de producción después de décadas, y otros van evolucionando, reinventándose con prestaciones superiores (Flangers, Phasers, Delays digitales, Compresores, Octavadores, etc…). Si echamos un vistazo a la web del fabricante (www.bossus.com), constatamos que el catálogo de pedales compactos es relativamente escaso si pensamos en la enorme variedad de pedales que Boss ha comercializado a lo largo de los años. Muchos modelos son piezas de coleccionista, y se llegan a pagar varios cientos de euros por los modelos más cotizados en Ebay. El culto al pedal analógico y/o “Vintage” queda patente en países como Japón o Estados Unidos, en los que probar un pedal es toda una experiencia: raras veces el vendedor se queda pegado al posible comprador. Consciente de la importancia que el músico otorga a la búsqueda de su sonido particular, el tendero de turno averiguará las necesidades del cliente y pondrá a su disposición todos los artículos de su stock particular para satisfacer al comprador, que podrá recrearse tranquilamente en su música.
 En una ciudad como Tokyo, el 90% de los negocios de instrumentos musicales están concentrados en un par de calles, en el barrio de Ochanomizu. Es fácil ver a cientos de guitarristas “gaijin”(extranjeros) buscando el santo grial de los pedales japoneses. En estas tiendas es fácil encontrar modelos descatalogados de Boss (de segunda mano) o los carísimos pero excelentes Maxon, así como marcas niponas totalmente desconocidas para la mayoría del público. En la Gran Manzana, toda la gama de la marca se halla expuesta de forma convencional en las grandes cadenas (Guitar Center), y es en las pequeñas tiendas de material de segunda mano donde encontramos a los cazadores de pedales (Ludlow Guitars por ejemplo, tiene una buena selección de pedales y guitarras de segunda mano). Echemos un vistazo a las joyas más buscadas de Boss…
BOSS DM2 Y DM3 : (overall ratings en Harmony Central : 10 y 9.4) Los primeros delays analógicos de Boss destacan por su calidez y su aire “Vintage”, con un deje de oscuridad y misterio. Los guitarristas que han tenido la fortuna de probarlos echan pestes de las nuevas gamas digitales de la marca, acusándolas de sonar estériles y totalmente carentes de personalidad. Alternativa: se puede encontrar una equivalencia en cuanto a sonido japonés en el pedal analógico Maxon “Vintage” AD9 PRO, suena igual, aunque pagué más de 300 euros por un ejemplar en una tienda de Tokyo. 
BOSS DIMENSION DC 2 Y 3 : (overall ratings en Harmony Central : 9.4 y 9.5) Esta serie de pedales destinadas al mercado japonés colorean de forma sorprendente el sonido, nada que ver con un chorus. De nuevo, calidez y percepción Vintage en el tratamiento casi orgánico de su sonoridad. Matices sorprendentes que no puedo describir salvo recogiendo retazos de varios testimonios. Este devora-pilas de tan sólo 4 botones de acción directa además es extremadamente silencioso y da un curioso empaque a la distorsión. Alternativa : desconocida, intentar recrear con pedalera analógica. 
BOSS DUAL OVERDRIVE SD2 : (overall rating en Harmony Central : 8.6) Uno de los grandes pedales de distorsión misteriosamente desaparecidos. Pese a no ser el santo grial de la marca (aún se encuentran, de hecho tengo uno), es un ejemplar buscado por su versatilidad. Overdrive y distorsión regulables en un solo pedal, para pasar de la suavidad a la violencia de un pisotón. El control de modo es la clave, es posible seleccionar qué acciones vamos a realizar al pisar el pedal: overdrive a distorsión, distorsión a limpio u overdrive a limpio. La sonoridad del OD1 combinada con la magia del veterano Turbo Distortion en una configuración muy particular. Alternativa : comprar dos pedales Boss (pisándolos a la vez para pasar de uno a otro) o usar una pedalera para pasar de una sonoridad editable a otra. 
BOSS DYNAMIC FILTER FT2 : (overall rating en Harmony Central : 9.5) Esta máquina de tocar Funk juega con los pasos de banda, el típico Envelope Filter que otras marcas han popularizado. El FT2 actúa sobre los registros graves de forma cíclica, creando un efecto de autowah analógico y primitivo. Aplicado a un bajo o a un teclado, este pedal consigue crear atmósferas sorprendentes. Para ajustar los “quacks” a voluntad, basta conectar un pedal de expresión. A caballo entre el wah y el filtro, tristemente descatalogado. Alternativa : El nuevo AW3 de Boss para autowah, o la serie Q-Tron de EHX 
BOSS ENHANCER EH2 : (overall rating en Harmony Central : 8.8) Ideal para conseguir esa ecualización secreta tan ansiada en las rítmicas metaleras o para imprimir colores “Vintage” en limpio. Tocar con el EH2 conectado es como quitar una vieja manta que tapa tu ampli, es capaz de afilar el sonido, dotándolo de la presencia necesaria para rejuvenecerlo en la mezcla. Situado tras los pedales de distorsión, altera el contenido armónico del sonido y consigue disolver la sensación de “barullo” al conectar varios efectos. Alternativa : jugar durante horas con un pedal de EQ, aunque será difícil obtener el mismo resultado, el EH2 no amplifica las frecuencias, las mejora y define. Existe una versión anterior a este Enhancer, el EH1, también descatalogado. 
BOSS HI BAND FLANGER HF2 : (overall rating en Harmony Central : 9.2) Un Flanger ochentero más sutil que las series posteriores BF. Si su uso se ciñe a su propósito, es un gran pedal. Para los que buscan un efecto más coherente y moderno, hay otros pedales ahí afuera. Los que sepan apreciar el juego de altas frecuencias disfrutarán de un sonido Zappa muy satisfactorio o unos buenos arpegios para Reggae o incluso Country. Calidez y buenas vibraciones para este pedal capaz de sonar contemporáneo y muy, muy raro. Alternativa : Boss BF2 o algún Flanger Maxon. Recreable en pedalera moderna. 
BOSS HEAVY METAL HM2 : (overall rating en Harmony Central : 8.1) El HM2 se sitúa en el centro de la cadena evolutiva de las series HM, entre el HM2 y el HM3 (bautizado como Hyper Metal). Usado frente a un buen combo valvular, el HM2 no defrauda. Este pedal claramente rockero es capaz de desgranar sonoridades aptas a muchos estilos, del Blues al Heavy Metal más agresivo. Por suerte, sus registros quedan lejos del hiriente Metal Zone. Especialmente recomendado para rítmicas oscuras y nórdicas. Brutal. Alternativa : Por suerte, muchas, no faltan los pedales de distorsión, como el Boss ML2 (Metal Core) o el MD2 (Mega Distortion), o un cabezal saturado a tope. 
BOSS PARAMETRIC EQUALIZER PQ4 : (overall rating en Harmony Central : 9.5) Una de las joyas de Boss, éste es uno de los más buscados. Este ecualizador multifrecuencia es un “must-have” tanto para acústica como para eléctrica, capaz de dinamizar y moldear el sonido del músico a su antojo, de fácil manejo. Realza el tono sin perder claridad, discriminando las frecuencias más molestas. Corrige problemas de Feedback en acústicas, añade color a las distorsiones más guturales, consigue sublimar los tonos limpios de las eléctricas y dramatiza los solos, ¿qué más se puede pedir? Alternativa : Otros pedales de EQ avanzados requerirán horas de reglaje, pero el PQ4 no excluye frecuencias en su área de trabajo, con lo cual sería posible su recreación en rack o pedalera con controles de EQ muy versátiles. 
BOSS SLOW GEAR SG1 : (overall rating en Harmony Central : 7.8) Otra rareza en busca y captura. Sus efectos “Volume Swell” necesitan de un periodo de aclimatación por parte del usuario menos experimentado, que tenderá a usar un compresor para mitigar la dificultad de un buen reglaje, pese a tener sólo dos botones. Otras opiniones asemejan su sonoridad a la del violín, se le supone la cualidad de poder dulcificar el ataque de una nota progresivamente, hasta matarla. Otra review asemeja su funcionamiento a un pedal de volumen, con la particularidad de que el efecto depende directamente de la fuerza ejercida en el ataque, y con un ciclo de actuación similar al de un autowah (sin tocar en absoluto las frecuencias, por supuesto). Ideal para el Country, el rock experimental y progresivo. Con ambos controles al máximo, actúa como un eliminador de ruido. Dependiendo del equipo con el que se monte, los ajustes deberán ser revisados dada su alta sensibilidad. Alternativa : Pedal de volumen muy expresivo + noise gate. 
BOSS SPECTRUM SP1 : (overall rating en Harmony Central : 8.6) Carísimo y descatalogadísimo pedal de Boss. Pese a no ser el mejor pedal que la marca ha sacado al mercado, su particular sonido le sitúa en la lista de los “Most Wanted”, y en un puesto muy respetable. Similar a un wah estático mezclado con un ecualizador paramétrico de una banda, consigue sorprender al guitarrista (y al teclista). Las opciones se multiplican sabiendo usarlo con propiedad, cristalizando los registros limpios y añadiendo paletas sonoras a los pedales de distorsión. Puede usarse para realzar los solos en las medias frecuencias, ofreciendo dispares resultados al montarse pre o post-distorsión. Alternativa : Ecualizador paramétrico japonés Ibanez (sólo banda central). 
BOSS T WAH TW1 : (overall rating en Harmony Central : 8.6) El auténtico Touch Wah rivaliza con todos los auto wahs del mercado. Adiós a la esclavitud de tener que ceñirse a los precisos ciclos de dichos pedales, el TW1 responde a la fuerza del ataque, capaz de ejecutar un wah por golpe de púa. Diversión a tope para una buen solo, pero es un sonido demasiado excéntrico para ser usado más de dos o tres veces en un concierto. No destaca por su riqueza armónica sino por el hecho de poder ajustarse a cierta sensibilidad. Ideal para conseguir desde sonidos Disco en limpio o Sonic Youth/Grateful Dead con algo de caña. Alternativa : las series G-Dec de amplificadores Fender han recreado la circuitería Touch Wah en su gama de efectos DSP, sin duda una gran idea… 
BOSS POWER DRIVER PW2 : (overall rating en Harmony Central : 7.6) Otro gran pedal de distorsión con el toque de la marca. Acusado de ser en realidad un pedal de overdrive, el PW2 reacciona espectacularmente junto a otra fuente de distorsión (ampli saturado, otro pedal), pero en solitario no alcanza las cotas de dureza que sus controles (“muscle”, “fat”) hacen suponer. Al máximo, la saturación obtenida se perfila adecuada para fabricar sonoridades “Grunge” y “Stoner” de muy buena factura, ya que es más un Fuzz que otra cosa. Muy flexible y versátil, puede usarse para colorear la señal de manera efectiva. Recientemente añadido al equipo de The Edge…Alternativa : Hyper Fuzz, Big Muff o un buen pedal de distorsión “alternativa”. 
BOSS VIBRATO VB2 : (overall rating en Harmony Central : 8.7) Visto en Ebay al precio de 600 USD. Conseguir un VB2 no es moco de pavo. Uno de los mejores circuitos de vibrato que se han fabricado. No confundir Vibrato con Tremolo… Este efecto de modulación es el favorito de Graham Coxon (Blur). Consigue sonoridades de gran claridad, calidez y cremosidad. Un clásico raro y misteriosamente descatalogado, en el que lleva tiempo encontrar los “puntos calientes” pero que compensa todo esfuerzo. Su pseudo-chorus / pitch shifter brilla en limpio y arpegiando, pero roza la ciencia-ficción con distorsión. Muy musical. Alternativa : Dunlop Uni-Vibe Stereo Chorus, tal vez… 
No están todos los que son ni son todos los que están, pero espero que esta labor de investigación os haga descubrir nuevos y gaseantes juguetes con los que ampliar vuestra paleta sonora particular. Recordad, la felicidad está a un paso…  Freebird 2008-10-09 08:05:37 |
